Esas fueron las palabras que el empresario David Canarias escuchó una mañana de verano, después horas de búsqueda de su amada Alegra Bustamante, el gran amor de su vida quién había desaparecido dejando sólo una confesión y destruyendo todo lo que había construido juntos. David, hijo de unas de las familias más respetables y ricas de Ibiza, había quedado viudo con el corazón roto y con un hijo pequeño a su cargo, endureciendo así su carácter y convirtiéndolo en un hombre de mano firme y autoritaria, aunque no siempre fue así. Sin embargo, lo que terminó como una tragedia, en realidad empezó como una maravillosa historia de amor, donde el destino hizo de las suyas para bien y para mal y, donde el amor siempre estuvo presente, aunque no como él hubiese querido.
Nunca se está demasiado preparado para leer esta historia porque cala hondo en el corazón, pero es hermosa, simplemente hermosa y te hace volver a sus líneas para leer este amor.
Una respuesta
Nunca se está demasiado preparado para leer esta historia porque cala hondo en el corazón, pero es hermosa, simplemente hermosa y te hace volver a sus líneas para leer este amor.